PINCELADA ROMÁNTICA (*)
(Al pintor Glicerio Villanueva Medina)
Se deslizó el pincel por el cielo infinito
plasmándose el paisaje en el sencillo lienzo,
esa tu alma de artista desgarró los silencios
cuando viste la estampa de tu anhelo cumplido.
Te conocí de cerca en la tierra querida
hacen ya tantos años que me parece un sueño
¡Oh! Sencillo maestro de los colores dueño
perdurable en el tiempo, de callada alegría.
Has pintado la tarde, la lluvia, los caminos
vive el río en tus obras, las flores campesinas,
el “Incendio de Chota” la historia, su tragedia;
pero también lo hermoso de nuestro mundo andino.
Ya bailan los colores en prodigiosas manos
el pincel se alborota en un trazo perfecto
surgiendo primoroso el arte hecho retrato
y el amor hecho imagen como un grito lejano,
Con Estuardo me toca pintar con poesía
las cosas de este mundo en la escala del tiempo
y vamos delineando la brisa del recuerdo
de esta tierra que amaste y a la que diste vida.
Ya ves que yo te encuentro más allá de mi verso
pintando acaso el rasgo de agorero celaje,
mi pluma de poeta siempre inquieta y de viaje
ha de trovar el arte de tu extramuro paso.
Chota va deslizándose, amorosa y romántica
envuelta en la acuarela de bellísimos tiempos
soñamos admirando tu pulcritud estética
y nos sentimos niños, tiernos, buenos e inquietos.
No te has ido Glicerio, te has quedado en la sala
y te sentimos cerca, comunicante y calmo,
quieren hablar tus manos cuando veo tus cuadros
y te encuentro pintando en el pecho del alba.
(*) Luis Alejandro Díaz Martínez “DIMAR”
(Al pintor Glicerio Villanueva Medina)
Se deslizó el pincel por el cielo infinito
plasmándose el paisaje en el sencillo lienzo,
esa tu alma de artista desgarró los silencios
cuando viste la estampa de tu anhelo cumplido.
Te conocí de cerca en la tierra querida
hacen ya tantos años que me parece un sueño
¡Oh! Sencillo maestro de los colores dueño
perdurable en el tiempo, de callada alegría.
Has pintado la tarde, la lluvia, los caminos
vive el río en tus obras, las flores campesinas,
el “Incendio de Chota” la historia, su tragedia;
pero también lo hermoso de nuestro mundo andino.
Ya bailan los colores en prodigiosas manos
el pincel se alborota en un trazo perfecto
surgiendo primoroso el arte hecho retrato
y el amor hecho imagen como un grito lejano,
Con Estuardo me toca pintar con poesía
las cosas de este mundo en la escala del tiempo
y vamos delineando la brisa del recuerdo
de esta tierra que amaste y a la que diste vida.
Ya ves que yo te encuentro más allá de mi verso
pintando acaso el rasgo de agorero celaje,
mi pluma de poeta siempre inquieta y de viaje
ha de trovar el arte de tu extramuro paso.
Chota va deslizándose, amorosa y romántica
envuelta en la acuarela de bellísimos tiempos
soñamos admirando tu pulcritud estética
y nos sentimos niños, tiernos, buenos e inquietos.
No te has ido Glicerio, te has quedado en la sala
y te sentimos cerca, comunicante y calmo,
quieren hablar tus manos cuando veo tus cuadros
y te encuentro pintando en el pecho del alba.
(*) Luis Alejandro Díaz Martínez “DIMAR”
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